Descubren murales que tienen más de 200 años

Varias pinturas murales han quedado al descubierto tras permanecer ocultas por muchos años en las paredes de la conocida Casona Montjoy, ubicada a media cuadra de la plaza principal de Lambayeque. Entre esas obras destacan escenas pintadas con colores suaves, similares a los tonos pastel, las cuales fueron hechas en 1787 en el arco de ingreso de ese local conocido también como la Casa de la Logia.

Las valiosas pinturas estuvieron a punto de ser dañadas y hasta eliminadas durante los trabajos de rehabilitación de la casona. La intervención del arquitecto restaurador José María Gálvez Pérez permitió poner a buen recaudo las pinturas que adornan los zócalos y pisos del primer y segundo nivel del inmueble de más de 400 años de antigüedad.

Según Gálvez Pérez, el hallazgo de las pinturas es importante porque permitirá conocer más sobre la arquitectura de la casona, cuyas principales características son las anchas paredes, grandes patios, escaleras y balcones distribuidos en 30 ambientes; pero sin duda lo que más impresiona es el balcón colonial tallado en madera, considerado uno de los más grandes de Latinoamérica.

Los especialistas que trabajan en la reconstrucción del antiguo patrimonio han adelantado que la casona quedará como fue originalmente debido a que se consiguió un lote de fotos tomadas por Enrique Brüning a fines del siglo XIX. Estas imágenes no formaban parte del proyecto de restauración que se presentó y luego aprobó el Instituto Nacional de Cultura.

“Lo que falta es colocar los pisos y pintar el extenso balcón. La casona quedará en perfecto estado, pero se respetará el diseño original, sin cambiar ningún detalle. Por el contrario, estamos rescatando detalles muy valiosos como las pinturas y el diseño genuino”, aseguró José María Gálvez.

Por el momento, los murales son el secreto mejor guardado de Lambayeque y han tenido que ser sellados con una tela especial porque se encuentran en un proceso de fijación. Sin embargo, dentro de un mes, los amantes del arte colonial más genuino podrán disfrutar de verdaderas joyas pictóricas que fueron plasmadas en los muros de la Casona Montjoy, uno de los más importantes vestigios del patrimonio cultural lambayecano.